Un marzo complicado
El segundo trimestre siempre ha sido duro para mi. Como alumno y como profesor. Siempre he dicho que en el primero, empiezas el curso con las pilas cargadas y pronto te ves en noviembre y pensando en la navidad. El tercero, aunque cansado, mejora el tiempo, se alargan los días y vas viendo el verano cerca. Pero el segundo trimestre es una travesía por el desierto. Enero dura doscientos días y Febrero, aunque es más corto, parece que dura otros doscientos más. El resultado es que llega Marzo y suelo estar siempre hecho unos zorros. Este año además, por motivos personales ha sido mucho más duro de lo normal con lo que he llegado con el depósito en la reserva.
No he podido salir mucho en bici, no he podido sacar ratos de lectura, y en general, no he podido sacar ratos buenos para casi nada. Lo que es una verdadera pena. Para postre las vacaciones de Semana Santa han llegado cargadas de lluvia y frío. Aunque hemos podido salir algo de casa y desconectar no ha sido lo que habíamos planeado.
No soy muy amigo de usar este rincón para hablar de mi mismo a nivel personal pero esta vez, quizás necesito una pequeña catarsis y por eso dejo esta pequeña «llorera» pública. Si yo me contara esto por boca de una tercera persona obviamente me diría que mantuviera el ánimo y que pensara en que pronto llegará la primavera, con más sol y más tiempo libre para disfrutar de todo y de todos. Mientras, no queda nada más que aguantar e ir tirando.
Marzo 2024